Artículos antitaurinos

LO QUE DICE EL DR ILLERA SOBRE LA LIDIA DEL TORO BRAVO

El profesor Juan Carlos Illera del Portal, director del Departamento de Fisiología de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid ha presentado un trabajo en el que estudia el estrés y los mecanismos neurofisiológicos desarrollados por el toro de lidia. Entre las conclusiones del trabajo expuesto, destaca el menor estrés sufrido por le toro de lidia en relación con otras especies de ganado -cuyo principal factor estresante es el transporte- y la teoría, a falta de nuevas investigaciones, de que el toro no sufre dolor durante su lidia.
El profesor Illera ha comenzado su disertación definiendo el concepto de estrés y los tipos existentes de agentes estresantes: cualitativos (físicos, psicológicos o emocionales, mixtos o físico-emocionales) y cuantitativos, analizando la intensidad y duración del estímulo (agudos, crónicos o intermitentes crónicos). También ha querido aclarar que «en fisiología siempre hay respuestas individuales, aunque exista un patrón general, cada uno responde de forma distinta ante un agente estresante, no es la misma respuesta de estrés dependiendo de la raza o de la edad».En su exposición, el profesor ha explicado la respuesta del animal de lidia ante el estímulo estresante: «La mayor amenaza, el mayor factor estresante del toro en la lidia, es el momento de la salida, cuando se enfrenta a la plaza y el bullicio. Esa amenaza desencadena una reacción o bien de lucha o de huída (acometida o no), después tantea la situación dentro de la plaza (mira, observa, controla) y, finalmente, desarrolla la respuesta agresiva, mediante la movilidad o exhibición de agresión».También comparaba el comportamiento de los toros de lidia en relación con otras especies: «Es muy raro que un toro salga a la plaza y se tumbe a dormir. En cambio, en otras especies, si que ocurre ante un estímulo estresante, que desencadena una incapacidad para enfrentarse o depresión, como intentando olvidarse de ese estímulo».Para presentar las primeras conclusiones del estudio, el profesor Illera señalaba que se lleva estudiando los valores de las hormonas liberadas ante situaciones estresantes durante casi 12 años. Fundamentalmente, y para profundizar en este estudio, se han analizado toros y novillos, sobre los que se han estudiado los niveles de Cortisol, Epinefrinas y b-endorfinas (respuesta inhibidora del dolor).Las conclusiones alcanzadas en las primeras fases del estudio afirman que «el estrés que sufre el toro o novillo en la salida del chiquero es el más elevado, pero aun así, es mucho menor que el que sufre otro tipo de ganado a la hora del transporte, en el caso estudiado, en un viaje de dos horas al matadero. Con el estudio queremos comprobar que el toro de lidia tiene un mecanismo especial de adaptación, y no sufre el mismo estrés que otro tipo de animales. Según los primeros resultados, el nivel de estrés en el toro de lidia es diez veces menos en relación con otras reses».Por último, el profesor Illera habló del estudio del dolor en el toro de lidia: «El toro tiene varios mecanismos receptores del dolor. Cuantos más receptores estén bloqueados, más aumenta el umbral del dolor. En el caso del toro de lidia, durante la misma libera muchas b-endorfinas, más que cualquier otro tipo de animal en otra situación. Por eso, nosotros somos de la idea de que el toro no sufre dolor durante la lidia. Si al animal algo le hace daño, su respuesta habitual será la huída, no volverá a acometer al caballo, conociendo el dolor que se le va a infligir, con la normalidad con la que lo hace».
Un estudio revela por qué el toro no sufre en la plaza. El profesor Juan Carlos Illera del Portal, director del Departamento de Fisiología Animal de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid, ha realizado un estudio que demuestra de manera científica que el toro tiene menos estrés durante su lidia que durante el transporte. En el trabajo, en el que colabora nuestro compañero Fernando Gil-Cabrera, también se aclara que el toro, ante el dolor, libera unas hormonas, las betaendorfinas, que contrarrestan el sufrimiento, que llega a ser casi nulo. En una amplia entrevista concedida a la revista 6Toros6, realizada por José Luis Ramón, Illera explica con detalle el estudio que se está realizando en la Facultad de Veterinaria y del que forma parte la Tesis Doctoral de Fernando Gil-Cabrera. Los resultados preliminares ya se presentaron en el VII Symposium de Zafra en el 2005 y sus conclusiones fueron recogidas y publicadas por el director de este medio, entonces en Burladerodos.com. En la entrevista, Illera explica que lo primero que encontraron al comenzar a trabajar es que «el toro es un animal, entre comillas, especial endocrinológicamente hablando, ya que tiene una respuesta totalmente diferente a la de otras especies animales. Hemos llegado a comprobar con medidores del estrés, que el toro tiene durante la lidia> menos niveles hormonales que durante el transporte» Estas mediciones han sido realizadas a toros que son devueltos a los corrales, unos antes de ser picados, otros después y otros incluso con banderillas: «Así hemos podido comprobar que el momento de mayor estrés para el toro es cuando sale a la plaza, desde que está en los corrales hasta que aparece en el ruedo. (…) El toro es un animal especial, que está perfectamente adaptado para la lidia. Y es que todos sus mecanismos endocrinos (hormonales) se ponen en funcionamiento de una manera totalmente distinta a la de cualquier otro animal o incluso las personas. Los novillos se estresan un poco más, pero en los toros, durante su lidia, los niveles llegan a ser prácticamente normales», explica Illera. En concreto, los toros en el ruedo liberan betaendorfinas, también> conocidas como la «hormona de la felicidad», que «bloquea los receptores de dolor en el sitio donde éste se está produciendo hasta que llega un momento en que el dolor y el placer se equiparan, y deja de sentirse dolor», afirma Juan Carlos en la entrevista. Gracias a estas mediciones, descubrieron que «el umbral de dolor en los toros es grandísimo. Es decir, durante la lidia liberan diez veces más betaendorfinas que un ser humano. Y siete veces más que durante el transporte», lo que explica que el sufrimiento en los traslados sea mayor ya que se libera menos cantidad de dicha hormona. Illera comenta que en una corrida incruenta el sufrimiento del toro sería mayor: «Si no se le picara ni banderilleara, posiblemente siguiera con el altísimo nivel de estrés que tiene al salir al ruedo. La puya provoca un mecanismo doble en el toro: por un lado le estresa y por otro le produce dolor: y, por consiguiente, al sentir dolor, comienza a liberar las betaendorfinas que lo matizan. (…) Incluso hemos visto que el toro tiene mucho más estrés cuando es recortado que cuando es lidiado y toreado. Como no hay dolor, liberan menos betaendorfinas y, por tanto, éstas no suplen la sensación de estrés y de sufrimiento». En la amplia entrevista concedida a 6Toros6, Illera del Portal explica las razones por las que un toro vuelve al caballo después del primer puyazo: «Se trata de un animal con un mecanismo especial que responde rápidamente, en milisegundos, con la liberación de cortisol y catecolaminas. Un humano tarda más en responder. El toro es distinto a los demás animales porque, en cuanto tiene estrés, en mucho menos tiempo que un segundo ya está liberando hormonas para contrarrestar esa situación». Una vez que ya se han llegado a estas conclusiones, ahora el objetivo del estudio es»recoger muestras de músculo y ver cuántos receptores están bloqueados ante el dolor. Y en cuanto tenga medido el número de receptores bloqueados, yo podría aseverar perfectamente que ese animal no sufre. Así como lo digo: no sufre dolor. De momento sólo puedo decir que creo que no sufre demasiado dolor, pero en cuanto avancemos en la investigación, y sepamos que los receptores están bloqueados, podré afirmar que ahí no hay ninguna sensación de dolor», sentencia el veterinario

13 comentarios sobre “LO QUE DICE EL DR ILLERA SOBRE LA LIDIA DEL TORO BRAVO

  1. «Por mucho ajetivos originales que use, (comeflores y demas chuflas…) pertenece ud al colectivo patético y deleznable que campea por España y que supone junto a otros pocos cada vez menos, la verguenza del resto. Gracias a personas como ud, la humanidad toma su pero versión y hace buena cualquier teoría misantropa ( repulsión por el humano). Le deseo de corazón el más atroz de los canceres dolorosos para sus últimos años de vida, para que le de tiempo a reflexionar tan agudamente como lo ha hecho, sobre la vida y el dolor.»
    He intentado dejarle esto en su correo pero no hay forma, se lo dejo aquí, aunque espero que esté muerto y sólo pueda leerlo de calavera presente.

  2. Me parece que no sabes de que va mi blog. Espero que lo leas y rectifiques. Busca y encontrarás la respuesta que como veterinario doy yo a las declaraciones que has leído en esta entrada del blog.

  3. Soy veterinaria y profesora de farmacología. Lo que cuenta el doctor Illera de la liberación de endorfinas es cierto, también liberamos nosotros endorfinas cuando sufrimos traumatismos, son sustancias endógenas que se unen a receptores similares a los de la morfina, proporcionando supuestamente sensación de bienestar. Pero eso no significa que debamos maltratar al toro para que libere endorfinas y así sea «mas feliz» y la sensación de que le están matando «más placentera»; si el animal está liberando semejante cantidad de endorfinas es porque el nivel de estrés y de dolor que está sintiendo es tan grande, que el propio organismo intenta bloquearlo liberando sustancias analgésicas. Me parece curioso el estudio del doctor Illera, sobre todo a nivel científico para demostrar la existencia de betaendorfinas que bloquean los receptores del dolor, pero esa liberación de sustancias placenteras no da ningún derecho a maltratar y torturar animales tal y como se hace en los espectáculos taurinos.
    Si tantas endorfinas se liberan ante el dolor, ¿por qué se utiliza la anestesia y la analgesia en las operaciones quirúrgicas, tanto en medicina humana como en veterinaria? Tal vez si el doctor Illera tiene que pasar alguna vez por quirófano será mejor que no le pongan ni anestesia ni analgesia, el nivel de endorfinas que liberará su organismo al ser cortado por el bisturí será tan elevado que se desmayará y no sentirá ningun dolor.

  4. Interesante tu opinión. Evidentemente las libera, pero el 90% de los estudios hechos sobre estas sustancias, en dolores posttraumáticos, dolor en isquemia de miocardio, o dolor en el parto, por poner algunos ejemplos, demuestran que son mediadoras y medidoras del dolor, y que efectivamente bloquean los receptores del dolor, pero su acción a lo sumo, es tan sólo paliativa de dicha sensación, que no olvidemos es un mecanismo de defensa de los organismos para luchar o huir.

  5. Brillante y acertado el comentario de María. Es muy importante que los veterinarios aporten opiniones y datos convincentes al respecto de esta barbarie(los del Dr Illera en absoluto lo son.

  6. La gente hoy en dia se cree que la carne que comemos nace en las bandejitas del corte ingles….

    Que los animales se maten unos a otros es ley de vida. Y no se vosotros, pero yo preferiria ser toro, vivir en una dehesa y no ser cerdo, vivir en una granja apretujao con tropecientos cerdos mas, cuyo destino es morir, ademas mucho antes que los toros.

    Dejando eso aparte, la corrida de toros es la cultura española. Aparte de que no es ninguna barbarie, esta tan arraigada en este pais que por mucho que cuatro ignorantes que van de ecologistas progres ataquen a la corrida de toros no conseguiran erradicarla. De hecho el edificio mas rentable de españa no es ningun banco, ni siquiera es un estadio de futbol. Es la plaza de toros de las ventas.

    En lo respectivo al comentario de suso que desea que todos los amantes de los toros nos muramos de cancer, solo decirle:
    ¿Y tu llamas a la gente que le gustan los toros «colectivo deleznable y patetico, la verguenza del resto»
    No creo que alla mucha gente que al leer tu comentario sienta otra cosa que no sea la verguenza de que alguien como tu desee la muerte de otras personas, que al contrario que los toros, tiene razon y alma. Creo que es bastante peor que una corrida de toros.
    Atentamente
    Cadderly

    1. Todo torero de mi país (México), añora con llegar a torear en la plaza de las ventas, creo que eso habla de la grandeza de esa plaza y creo que los españoles son gente de arraigo y verdaderamente valientes, porque sino como es que tienen,festividades, como la de San Fermín en las que es ese deseo de enfrentar al toro, un ser mucho más grande y fuerte, sólo por el hecho de probar su propia valor?, no he visto en el mundo otra cosa igual.

  7. Hola!
    Soy una estudiante de veterinária.
    Estamos haciendo un trabajo de deontología sobre la tauromáquia, queremos poner un apartado en el que se explique las fases por las que pasa el toro desde la ganadería hasta que su tortura termina y el papel que desempeña el veterinário en dichas fases, podrían recomendarme alguna página web, artículos, bibliografía, etc.
    Muchas grácias.

  8. Pingback: Anónimo
  9. Creo que el profesor Illera manej perfectamente la teoría, pero los animales no pueden hablar y manifestar su propio sentir, aún así creo que su apreciación no es incorrecta, no ,aclaro ,no estoy a favor de las corridas de toros, pero cuando las he visto admiro la fortaleza y enteresa del toro, y el valor del torero, porque si el toro logra verlo lo atacará y sin dudar lo matará. Hace siglos (tal vez aún se observa el algunas etnias)el valor se medía por situaciones parecidas, enfrentar y matar algún animal salvaje eran rituales de valor y hombría, ahora la humanidad ha cambiado, y la tauromaquía pronto desaparecerá, pero desearle a alguien un dolor y sufrimiento que no nos hace también crueles, si somos capaces de torturar con nuestros deseos a alguien, eso nos hace mejores?. Estarían dispuestos a torturar si pudieran a alguna de esas personas a las que tanto odían por estar a favor de la tauromaquía. Que no fue Gandhi que dijo que al ojo por ojo el mundo se quedaría ciego?, entonces quienes son lo buenos?.

  10. No existe actitud más vil que un ser humano odie a otro ser humano. El toro es un animal que indefectiblemente tiene que morir porque pertenece a la cadena alimentaria de los seres humanos y el toro de lidia en especial,, es una raza única creada por el hombre, con las condiciones adecuadas para combatir en una plaza y morir en ella de ser el caso, y aunque se vea cruento el espectáculo, ese tipo de toro tiene que pasar por ese trance de aparente dolor, que servirá además para evaluar o tasar su casta. Esto genéticamente es importante para que su especie no desaparezca. Reitero el toro de lidia nació para combatir en una plaza y que en algunos casos por su calidad, suele regresar vivo a su ganadería porque se ganó la vida, ese es su derecho y un derecho concesionado por el hombre.

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