Potección animal

MI RESPUESTA AL ESTUDIO HORMONAL EN EL TORO LIDIADO PUBLICADA EN MERCURIO DIGITAL

El toro sí sufre PDF Imprimir Correo
Escrito por Fabiola Leyton
12-05-2008 a las 09:18:30
El Dr. José Enrique Zaldívar Laguía respondió a la tesis del dr. Illera, según la cual “el toro, durante la lidia, no sufre”. Según la peculiar tesis del doctor Illera, el toro sería un animal hormonalmente diferente y único, un mamífero extraordinario que no respondería al dolor como los otros animales… antes bien gozaría de la torturante y agonizante lidia en la plaza de toros.

El dr. Zaldívar, Licenciado en Veterinaria por la Universidad Complutense de Madrid, Veterinario colegiado número 1449 por el Ilustre Colegio de Veterinarios de Madrid, ha respondido al estudio del dr. Illera refutando sus interpretaciones de los flujos hormonales medidos en diferentes toros, antes y después de la lidia.

En su estudio, el dr. Illera argumentaba que el cortisol (hormona que inhibe el dolor) segregado por el toro en situaciones de stress, según sus mediciones, era más alta durante el transporte del toro que después de ser lidiado. Pero Zaldívar interpreta los datos de otra manera: el cortisol, para ser segregado a la sangre, necesita de la mediación del sistema nervioso, por lo que medir los niveles de cortisol en un animal con el sistema nervioso destrozado por las herramientas de tortura de la lidia es espúreo. Además, es ridículo medir los niveles de cortisol en un animal vivo y compararlo con los niveles que presenta un animal muerto (medición post-mortem), previamente torturado y masacrado en la lidia, sobre todo porque no se hicieron mediciones «durante» la tortura.

La suerte de la puya

La puya es una vara con un cuchillo en forma cónica, que se entierra en el morrillo del toro, donde están los músculos que mueven el cuello. El fin de la puya es impedir los movimientos bruscos de la cabeza y «humillar» al animal haciendo que no pueda levantar la cabeza.

Los taurófilos argumentan que el uso de la puya sirve para «descongestionar» al toro que está bravo y ofuscado por la lidia. Sin embargo, lo que sucede con la tortura de la puya no es una simple descongestión porque el toro pierde hasta 10 litros de sangre en esta suerte, pues con el «barrenado» y el «mete-saca» se llega a hacer una herida 7,4 veces más profunda que lo normal. Otra estadística es que sólo un 4,7% de los puyazos logran cortar los músculos del cuello y dejar el resto de la anatomía local intacta: lo que se suele cortar con los puyazos mal hechos son los músculos de las extremidades anteriores y tronco (por eso los toros suelen caerse). Como dato: el toro tiene 36 litros de sangre, más o menos… por lo que la suerte de varas lo hace perder un tercio de su líquido vital.

La suerte de las banderillas

Las banderillas, arpones de hasta 16 mm.de largo, desgarran y cortan músculos, nervios y vasos sanguíneos. Empeoran la herida y el desangrado provocado por la puya, y hacen que el animal se desangre con más rapidez, fatigándolo y debilitándolo aún más.

Más sobre el cortisol

La respuesta neuroendocrina al cortisol no es la misma si el sistema nervioso está dañado, que es el caso del toro durante la lidia. Existen otros mecanismos hormonales, como el sindrome general de adaptación, en el que a causa del stress, el organismo trata de segregar cortisol frente a la situación amenazante, pero finalmente cesa su esfuerzo por agotamiento y sobre stress.

Otras hormonas de relevancia para medir el stress, que si (en el artículo que he copiado y pegado, dice que no fueron medidas) midió el dr. Illera, son las catecolaminas y las betaendorfinas. Las primeras (adrenalina y noradrenalina) son hormonas que ponen al organismo en alerta para luchar o huir, y son más altas en toros lidiados que en toros durante el transporte. Las betaendorfinas, por otra parte, no son las «hormonas de la felicidad» que se generan cuando existe placer como interpreta Illera, sino que su segregación aumenta de acuerdo al dolor físico y el stress. Las betaendorfinas aumentan especialmente en casos de hemorragia, en shocks neurogénicos y trastornos ventilatorios, todos manifestados en el caso de los toros lidiados. O sea: el toro lidiado genera más hormonas por dolor que por stress.

En resumen: el dr. Illera es frecuentemente citado por los taurófilos, porque su estudio científico respaldaría la carnicería de los toros. Sin embargo, el dr. Illera no ha respondido a la refutación hecha por el dr. Zaldívar, quien lo interpelado en diferentes ocasiones, recibiendo ni siquiera evasivas ni explicaciones por la falta de respuesta.

¿Será que la tauromaquia no tiene explicación ni justificación suficiente?

Fuente: Blog del dr. Zaldívar. Fuente imagen Rivera Ordóñez: Gabriel Tizón.

El resumen de mis conclusiones recogidas en el presente artículo es más o menos acertado, salvo la puntualización que he hecho en el texto sobre las catecolaminas y las betaendorfinas. Sobre estas últimas, yo intuyo que el toro las descarga más por dolor que por estrés, dado que si fuera por esta última razón, el estudio del Dr. Illera tendría todavía menos credibilidad. Sería absurdo pensar que descarga poco cortisol porque la lidia no le estresa más que el trasporte y que sin embargo secreta grandes cantidades de betaendorfinas por esta razón.

Otra puntualización que me parece importante es que no soy doctor, sino licenciado en veterinaria.

5 comentarios sobre “MI RESPUESTA AL ESTUDIO HORMONAL EN EL TORO LIDIADO PUBLICADA EN MERCURIO DIGITAL

  1. Por supuesto que el toro sufre muchísimo, el ser humano de alguna manera siempre quiere justificar las barbaries que comete, rechazo total a las corridas de toros, las peleas de gallos y de perros y todo lo relacionado con el maltrato animal.

  2. Needed to send you this very small remark to help say thank you once again with the incredible knowledge you have discussed in this case. This has been so wonderfully generous of you to convey without restraint what some people might have offered for an e-book in making some dough for themselves, certainly now that you could possibly have tried it in the event you considered necessary. These principles also acted like a great way to comprehend some people have the identical eagerness similar to my own to understand a little more when considering this problem. I know there are many more enjoyable moments up front for those who read your site.

Deja un comentario